El Restaurante Miguel Angel en Valladolid está ubicado en el edificio Mantilla, construido en el siglo XIX en el centro de la ciudad. Nuestras excelentes materias primas que sirven como base de los guisos, platos de pescado y carnes, hacen que el resultado sea del agrado de todos.
Todo ello en un acogedor comedor en el que se ponen sobre la mesa sabores autóctonos y puros, que estimulan los sentidos sin artificios innecesarios.
Toda una cocina de ambientación clasica pero que no rehuye de ningún postulado, y de cuyos fogones salen platos sabrosos, muy reconocibles y con mucho sabor: ¡Una bendicion!. Una cocina clásica pero con hechuras actuales, que no tiene problemas en ofrecer un suculento arroz a banda al horno, acompañado por un ali oli que potencia su sabor, un plato de gran sutileza; o unos rotundos garbanzos copiosamente ilustrados con callos…
Platos generosos que conviven en la carta con gambas o langostino de Huelva, higado de oca o bogavante nacional con ensalada. El restaurante es declaradamente ictiófago y la lista de pescados frescos son una tentacion a la gula.
Dorada a la sal, besugo al horno, un rodaballo salvaje de hechura milimétricamente perfecta o un delicioso rape con setas y piñones al horno, resueltos con un buen punto de cocción que realiza los sabores pristinos de un género de notable calidad. Fetén.
Para los carnívoros, buenos cortes de carne roja (entrecot, solomillo), las inconmensurables chuletillas de lechal o un guiso de aupa: perdiz roja, acompañada de uvas pasas e higos, bien cocinada y con un fondo que invita, literalmente a chuparse los dedos por su sabor y concentración.
Los postres siguen la tónica de la casa: postulados sencillos y presentaciones buenas para dar vida a platos como sus canutillos de crema tostada. Servicio muy profesional y bodega que no desilusiona, incluyendo más de 150 referencias.
Experto en cocina nacional e internacional. 32 años en el restaurante.
50 años de experiencia. Jefe de sala, somelier, relaciones públicas. Trato exquisito.
Nuestro especialista en guisos y en contundentes platos de cuchara.